Cuando ardan las calles
Y el cielo pierda su sentido
Cuando todo esté en llamas
Y solo queden suspiros
Cuando pierdas la llave
Que abre tu destino
Cuando rija la oscuridad
Olvidando lo vivido
Cuando ruegues piedad
Y nadie la tenga contigo
Cuando aceche la soledad
Porque todos hayan huído
Sólo entonces entenderás
El por qué de mi aullido